Aun cuando el dictamen para efectos del SAT ya no es una forma de fiscalización indirecta obligatoria, para el Seguro Social sí lo es.
Los patrones que hubiesen tenido a su servicio en el ejercicio fiscal 2014 un promedio anual de 300 o más trabajadores están obligados a dictaminar el cumplimiento de sus obligaciones ante el Seguro Social por contador público autorizado, en términos del artículo 16 de la LSS.
Aquellos patrones que no reúnan el promedio de número de trabajadores citado pueden optar por dictaminar el cumplimiento de sus obligaciones, observando el procedimiento legal aplicable (art. 16, segundo párrafo, LSS).
También pueden hacerlo, previa autorización del Instituto, quienes reciban una orden de visita domiciliaria, siempre y cuando el IMSS no hubiese iniciado la revisión documental respectiva. En este caso se tienen que dictaminar los últimos tres ejercicios (art. 159, segundo párrafo, RACERF).
Tanto los patrones obligados como los voluntarios tienen que presentar el aviso de dictaminación correspondiente ante el área de Auditoría a Patrones de la subdelegación correspondiente a su domicilio fiscal, a más tardar el próximo 30 de abril.
Esto los constriñe a exhibir el dictamen respectivo hasta el 30 de septiembre de 2015, salvo aquellos que presentaron el aviso como consecuencia de la notificación de una invitación del Instituto para corregirse o de una orden de visita domiciliaria, quienes cuentan con nueve meses para hacerlo, plazo que corre a partir de la fecha en que entregaron su aviso de dictaminación.
Finalmente los contadores independientes que verifican el cumplimiento de las obligaciones patronales en materia del Seguro Social deben enfocar sus esfuerzos en revisar tres aspectos medulares, a efectos de estar en condiciones de emitir una opinión respecto del estudio realizado, y los patrones que contratan este medio de fiscalización gozan de ciertas ventajas legales por los ejercicios dictaminados. Conoce los detalles de estos aspectos en el tema “Valor del dictamen IMSS”.
